Alas que revolotean en mi estómago,
cuerdas, que atan mi cuerpo a este mundo
Tijeras, tijeras, tijeras para cortarlas.
Quiero salir volando.
Un pie, luego, el otro,
deslizarse suavemente por este día
suspendido en el alambre del abismo.
Rosa M.
No conviene soltar del todo las cuerdas, si no puedes acabar más loca que yo :-).
ResponderEliminarEl abismo siempre bajo nuestros pies. Sujétate, al menos un poquito, que caer da vértigo.
ResponderEliminarBesos de jueves.
Ganas de bolar,, de libertad, de fluir, Fantastico
ResponderEliminarEn el borde mismo del abismo, sin pies ni manos, sólo la mente es capaz de cruzar la nada.
ResponderEliminarBesos.
No hay abismos para los soñadores, seguro que en esas vistas de pájaro encuentras algo bueno.
ResponderEliminar:D